Por que tener mascotas no solo es jugar y acariciar...

Los engaños de los vendedores de cachorros

19.09.2013 13:40

 

Los principales aspectos en los que se engaña a la gente cuando va a adquirir una mascota son: la raza, los papeles del animal, el estado de salud y la edad.

 

Antes de entrar en detalle de los 4 puntos anteriores, debemos tener en cuenta que la primer trampa que debemos evitar, es la que nos hacemos cuando buscamos una mascota en la calle; entendamos que si compramos a vendedores ambulantes, no esperemos una “garantía” del producto, por decirlo de alguna manera.

También debemos diferenciar entre los lugares establecidos; una estética o tienda de mascotas y una Clínica Veterinaria, con todas las diferencias que existen sobre los conocimientos del cuidado animal entre quienes atienden uno y otro lugar; pero además, si el establecimiento indica que es una Veterinaria, cerciorarnos que efectivamente el encargado sea un Médico Veterinario Zootecnista, con titulo y cedula.

 

Ahora bien, independientemente del lugar, quien busca una mascota puede verse engañado por el vendedor, quien puede decir todo lo posible por lograr la venta, incluso faltando a la verdad u ocultando información.

Foto: www.perrosamigos.com

 

La raza: Es común adquirir un cachorro de cierta raza, que con el paso del tiempo, deja de parecerlo. Los cachorros de razas parecidas, se ven todos iguales hasta cierta edad, al menos para los no conocedores, es por esto que al cruzarse esas ciertas razas parecidas, podemos no darnos cuenta que estamos adquiriendo un animal cruzado. Este es un problema que podemos evitar en mayor medida si adquirimos nuestra mascota en lugares establecidos y con personas de buena reputación.

 

Los papeles. Cuantas veces nos ofrecen cachorros cuyos padres tienen “papeles”, pero  que a ellos no se los tramitaron por no hacerlos más caros.

Primero, los únicos papeles que pueden decirnos que un perro es realmente de raza son: el Certificado de Pureza Racial y el Pedigrí, ambos emitidos por la Federación Canófila o por inspectores registrados en la misma; en ambos casos a los animales se les hará un tatuaje con un número, el cual debe estar también en el documento.

La cartilla de vacunación o un certificado de salud con los datos del cachorro no son documentos válidos que acrediten la pureza de raza del mismo.

 

Pedigrí. Es un documento en color azul, donde se indican al menos 5 generaciones de ancestros en ambos padres del cachorro.  Un cachorro sólo lo puede obtener si ambos padres lo tienen.

Certificado de Pureza Racial (CPR). Documento en color café, se expide para el animal en cuestión, sin importar las generaciones anteriores. Se otorga a perros de más de 8 meses de edad que cumplan con las características de la raza, siendo aprobado por un inspector de la Federación.

 

Cabe mencionar que no por tener cualquiera de estos documentos quiere decir que un cachorro será un perro sano, sólo quiere decir que es reconocido como un animal de raza pura o que cuenta con las características mínimas de la raza.

Como consejo personal, quien vende cachorros sin registrar, aunque sus padres “tengan papeles”, nos habla de la calidad que nos pueden ofrecer, un criador serio no dejaría cachorros sin registrar sólo por darlos baratos.

Con respecto a esto, pueden consultar la información más detallada dirigiéndose a la página de la Federación Canófila Mexicana  www.fcm.mx

 

El estado de salud: Los perros de acuerdo a su edad, deben llevar protocolos de salud específicos, principalmente, la desparasitación, la vacunación y un aspecto al que no se le da la importancia adecuada, la alimentación. El engaño consiste en que nos presentan cartillas de salud, donde se indica que el cachorro ya tiene algunos aspectos de medicina preventiva, esto podría ser un engaño ¡Ojo! ¿En qué debemos poner atención?

Primero, revisar que la cartilla tenga el nombre del Médico Veterinario y de la Clínica donde fueron atendidos, con dirección, teléfono y cedula profesional. De manera que uno pueda constatar esos datos. Segundo, que contenga los datos del cachorro que nos están presentando; con nombre de la raza, edad, sexo y color, por lo menos, si además tiene algún sistema de identificación o seña particular, mucho mejor. Tercero, que las fechas de las desparasitaciones y/o vacunas estén vigentes respecto al día en que deben aplicarse los refuerzos, así como la firma del Médico Veterinario delante de cada una de las fechas de lo que ya se aplico.

Foto: www.perros.facilisimo.com

 

La edad. Es un aspecto que han explotado muchos vendedores a raíz de la aparición de las razas que tienen versiones “mini”, como los chihuahueños, schnauzer, french poodle, entre otros. El engaño se da cuando ofrecen cachorros de menos de 25 días de nacidos, como animales de mes y medio o más, para aparentar que se trata de un perro miniatura.

 

Cualquier persona sin la información necesaria puede ser víctima de una o varias de las situaciones anteriores al mismo tiempo; como se menciono al principio, es más probable que esto ocurra cuando se adquieren mascotas en el comercio informal, aunque no es novedad que también ocurra en tiendas de mascotas establecidas e incluso en lugares que se promocionan como veterinarias, sin que en realidad lo sean.

 

Aunque en todos los ámbitos profesionales hay buenos y malos profesionistas, al adquirir una mascota en un criadero o centro de adopción registrado o con un Médico Veterinario que le ha dado seguimiento, nos ofrece la seguridad de que se está adquiriendo un animal en las mejores condiciones. Tener cuidado también con centros de adopción que omiten información sobre el estado de salud de los animales o sobre su edad.

 

Sin embargo como cada caso en único, lo mejor es asesorarse con su Médico Veterinario de confianza para que les indique las mejores opciones para adquirir una mascota, ya sea comprándola o adoptándola.

 

MVZ. Juan Carlos Villalobos Hermida

Buscar en el sitio